Serán los engaños o quizás sus enojos;
No lo sé, talvez sean sus sinceros ojos;
que miran la falsedad, de las ciudades;
cuando las dibujan a ciegas en edades…
Las pintan con colores en el cuaderno;
para maquillar, aquel cuerpo materno;
que se esconden detrás de este espejo;
que parecen descubrir, todo el reflejo…
Con pulsaciones, que cuidan este velo;
que se visten con recuerdos del vuelo;
tratando de convencer con los ideales;
a retoños que no perciben a los leales…
Que no presienten, el peso del vértice;
de la columna recta de cual mentalice;
patrañas que se inventan en el cuarto;
que se crean en esquinas, del incierto…
Palabras que tratan de perfilar al niño;
con astucias tontas, que hoy no duran;
que parecen dar años en aquel cariño;
con falacias, que se oyen y murmuran…
En noches oscuras, de aquel aposento;
mientras reposa ideando en el asiento;
dudando controlar sueños escondidos;
que no están en las manos esos oídos…
Esos caminos que son solo prestados…
No te creas dueño de nadie…
Tú arrogancia es funesta…
VERSOS DE DANTE ALIGHERI
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