Creo en la palabra que conduce a la paz, que es vida.
Creo en la palabra que hace de los pueblos una aldea global,
Creo en la palabra capaz de cabalgar en las praderas de la libertad.
Creo en la palabra que con su magia pone fin a los conflictos bélicos.
Creo en la palabra que nutre a la humanidad de valores éticos y morales.
Bendita palabra que rompe los muros de la incomunicación-
Prodigiosa palabra engalanada con una hoja de laurel como símbolo de victoria.
Palabra que seduce a los demonios de la violencia para abatirlos.
Palabra que enmudece no ante la furia de la violencia y la lacera-
Palabra débil o fuerte según las circunstancias.
Palabra indignada ante la miseria humana.
Palabra furiosa ante la destrucción de la naturaleza.
Palabra conmovida por las fronteras que separan a los pueblos.
Palabra que convoca al diálogo para abolir las guerras.
Palabra triste cuando no es escuchada.
Palabra emisaria del diálogo para evitar los conflictos bélicos.
Palabra en traje de luz vestida como símbolo de sabiduría.
Palabra de fraternidad universal
Palabra que no es una prédica en el desierto.