Aquellos antiguos amores
un día mi senda alumbraron;
y hermosos recuerdos dejaron
bordados de regios colores.
Lo mismo que místicas flores
que el verde jardín perfumaron;
aquellos antiguos amores
un día mi senda alumbraron.
Muriendo sus regios fulgores
mis sueños de amor marchitaron;
mas llenos de luces quedaron
con gratos y excelsos dulzores,
¡aquellos antiguos amores!
Autor: Aníbal Rodríguez.