ese dia los pajaros
se detendran a hablarme
y yo sabre que es tiempo de extasis.
se me abrira la rosa de la sangre
en azorado asombro.
vislumbrare mi rostro
con esa luz que se traslada
luego de haberse dado adentro
y ronda por la cara
en plenitud de entrega.
asi mi amiga, mansamante
ire a buscarte.
caminaremos bajo el filo del sol
que se desmaya
en nuestros claros ojos
y en algun lado
alguien que entiende
de cosas misteriosas
incendiara la tarde con poemas.