PUEBLO LLANO, SOBERANO
Los del pueblo
llano pagan,
lo que hagan
con maldad,
gobernantes
mal paridos,
corrompidos,
sin piedad.
Mienten mucho,
poco hacen,
lo que hacen
es birlar.
Hipnotizan
a devotos
y sus votos
pa´trincar.
Dictan leyes
que no cumplen,
y otras funden
sin dudar.
¡¿No les valen?!…
¡las derogan!,
si ahogan
su escalar.
Ahora quito,
luego pongo;
todo es tongo
a favor
de lo mío
que es sagrado,
no es pecado,
es mejor.
Y nos tienen
enfrentados,
cabreados,
con dolor;
mientras llenan
sus bolsillos,
diablillos
sin honor.
La avaricia
rompe el saco,
dan por saco
un mes más,
pero el karma
siempre llega
y doblega
ya sin más.
Despotismo
depravado,
descarado,
sin temor.
Una buena
guillotina,
medicina
pa´l pudor.
Y que conste
solo escribo
y suscribo
lo mejor,
pues…, si trazo
cuanto dicen
y bendicen
es peor.
Es el pueblo
quién decide,
no lo olvide
bien, señor.
Es el pueblo
dulce y llano
soberano
no es candor.
Rafael Huertes Lacalle