Amada, cómo te demuestro
el sentimiento secuestrado
por temores tardíos y pasados;
Amada, cómo retengo el palpitar
de los latidos por lo nuestro?
Cómo hago para no soltar
esta tensión devastadora
que débil me estremece!
Rara sensación que no aminora
el deseo cándido inexplicable
que al ser humano no pertenece
y no llega al climax razonable.
Amada mía, por ti ya no hay hora
el tiempo ni se acorta ni se dilata;
es vacío, relativo e intrigante.
Amor, ni mil besos rebosantes
ni mil caricias que comparta
en tu piel que amor desborda,
saciarán las ganas de adorarte;
porque el amor no transporta
solo deseos propios de la carne;
Este amor, amada mía, trasciende
los misterios que nos envilecen;
va más allá de lo creemos sentir
y lo que nunca , jamás , se entiende;
Amada, este amor no es amor de piel
que nos enceguece y sorprende;
este amor es del corazón y alma fiel.