Deseábamos quedarnos
y nos fuimos alejando del presente
añorando las veredas del camino
y la distancia se alzó entre los dos
dejándonos divididos.
¿Se habrá dormido el deseo,
inició su caminar el desamor?
o entre prados verdes y zarzales
se alejó un nuevo día
diciéndonos adiós.
Nuestras almas divididas
no volverán a juntarse
y nos quedaremos, sin quedarnos
marchándonos, sin marcharnos
por caminos diferentes.
Nuestras almas
agobiadas en soledad primera
voltearán con insistencia
y en su momento la vida
entre dos que se alejaron sin alejarse,
abrazará la muerte.
Autor…reh