Aquella mañana de primavera
Dictaba el preludio más divino,
Basto solo con preguntar la hora
y respondiste con el gesto más genuino.
Pasaron los días, pasaron las noches
La magia de los ojos no puede mentir
Y cuando me di cuenta ya era de ti.
Tomaste mis manos,
Besaste mi frente
Y de mi boca ferviente
Hablo la razón
Te quiero, te amo,
Bendigo el encuentro
Pero por favor no vayas a herir,
Con voz muy valiente dijiste: Jamás
“Las cosas que otros te hicieron
, son cosas que no pasaran ”
Y pasaron.
Escupí tu nombre,
Vomite el dolor,
Y al próximo reencuentro
Te digo adiós.
Estaba sentada esperando el bus,
En eso llegaste y te confronte,
Maldije mil veces
Y luego llore.
A los pocos días regresaste a mí,
Como diciendo perdona no me quise ir.
El orgullo brota donde hay dolor
Me di media vuelta
Y te deje partir.
Pasaron los dias
Pasaron los años
Llegaron reencuentros
Llegaron huidas
Y también pecados que nos retorcían.
Ahora agradezco tu paso por mi vida
Estoy llena de gozo
Y sin melancolía,
No niego que a veces voy al pasado aquel,
Del tiempo de rosas al atardecer.