Jordy S. Reyes

Preludio de ausencia

Alma, destronada, en ignominia...

 

Pena sin indulto ni amnistía, ave migrante.

 

Se desvanece hasta el fin del camino.

 

Inmerso entre sombras los grillos tocan un preludio de ausencia.

Carón se aproxima, portador de luz, barquero del Hades.

 

¡Llévame!

 

Pálido rostro juzga: infiel a tu propia tierra, has sido desterrado.

 

Ven, allá hay un convite, allá hay una fosa donde varios hijos de Gaia han ofrendado su juventud.

 

Ven que esta tierra es diferente y al pisarla al otro lado dejarás atrás la esclavitud, hay mártires rompiendo cadenas con las manos.

 

La venia es tuya, has dejado todo, acá hay ausencia de penas, te has rendido a la parca que te encamina.

 

¿Y dónde dejaré a mi cadejo?

 

Déjalo con tus vicios...

 

Acaricio al pequeño cerbero... 

 

Sube a la balsa... la caricia del óbito te consuela.

 

Así mismo... voy navegando el mar negro... voy pues a mi último viaje.

 

Jordy S. Reyes 

San Marcos, Guatemala.