Desde el aula efectiva de la escuela
se adiestran los valores y derechos
que infunden el amor en nuestros pechos
y en nuestra sociedad brillante estela.
Nos permite el aula observar la esquela
de patriotas que alzaron con sus hechos
la bandera y los fértiles provechos
del insigne ideal que el hombre anhela.
Desde el aula izamos un estandarte
para todo accionar noble y fecundo
que estimule la sapiencia y el buen arte.
Su incidencia tiene efecto profundo
que transforma el colectivo y la parte.
¡Desde el aula podemos guiar el mundo!