Desde finales de septiembre
me empieza el malestar.
-No encajo en la dinámica de consumo-
Por culpa de sus fanáticos
ya no disfruto ni el halloween.
-La impostura ha sido importada-
Esos desquiciados de la felicidad
-adictos a oscuras bebidas gaseosas-
le arrebataron el gris encanto a noviembre,
-confiscaron su tiempo, incluso su lluvia-
para forzar la alegría a cualquier precio.
Tal es su obsesión que el último mes
dura algo así como ciento veinte días
en los que estás obligado a ser feliz
porque es navidad.
Alexander Elías2023
#poética