Te esperaré entre una copa de vino, una almohada y una noche fresca.
Te esperaré a que tú voz hable desde tu interior. Y el vino en mis labios plasme los tuyos.
Te esperaré postrado en la almohada mientras mis brazos te llaman.
Vino amargo que brota un vacio, de quien en mi pecho está ausente.
Luna bella regalando frescura a la noche y que cierra mis ojos para estar junto a ti.
Entre suspiros profundos al deleitar una copa y llevar mi pensamiento hasta donde estés, hermosa mujer inalcanzable.