ninfadora

CUANDO MIS MANOS ME HACEN EL AMOR

Entre las sabanas de mi lecho,
Parezco volar
Cuando en el pleno de mi desnudez,
Me hago súbitamente mía.

Soy ferozmente presa de mis idilios,
Esclava de mis profundos deseos,
Dueña absoluta de mi propia delicia
Cuando viajo con la punta sudorosa de mis dedos;
Sobre la hechura fina de mi fisonomía,

Mi aliento es cada vez más extenso,
Mi suspiro es mas completo, profundo,
Vago lenta y sutil, ilimitada y poderosa
Ama y señora de mis más profundos adentros.

Navego en mi cuerpo majestuosa,
Descubriendo la forma de mis pechos
Quedando erguidos y hermosos mis pezones,
Mientras vuelo en mi viaje de lujuria,
Enajenación, delicia y placer.

Son mis manos las que se adueñan de mí,
Son ellas las que me hacen sudar,
Y quemar mi alma a fuego lento
Y me estremecen a cada roce;
A cada vuelo intenso de mis caderas.

En el cuenco de mis manos,
He mecido gloriosa mi capullo
Me he socavado en la humedad de mi cuerpo,
Y en mi delirio.

Mi piel ha volado al compás de mi pelvis
Mi más tierno botón se ha abierto a mí,
Al ritmo más sutil de mi placer,
Sonrosando dulce mi pubis

Me recorro, me poseo
Desde la punta de mi cabeza,
Has la línea fina de mis pies,
Desde la curva de mis senos
Hasta el cóncavo de mi monte de Venus.

He sido implacablemente mía,
Me entregado completamente a mi instinto,
he dejado que mis manos me posean
Me hagan suya,
Desde la apertura de mi liz,
Hasta el fondo de mi orgasmo,
Si yo he sido de mis manos, toda
Y ellas me han dado todo
Si son ellas mis manos,
Las que me llevan al idilio mas glorioso,
Cuando llega la ausencia,
A este lecho vacío
Que toma vida cuando llegan ellas,
Son mis manos mis fieles amantes,
En esas noches de soledad
Recorren todo de mí ser,
Y son completamente su esclava,
Cuando mis manos me hacen el amor.