Sigo siempre enamorado
de las aves y su vuelo,
de su canto liberado,
de su trino y de su anhelo.
Sigo siempre entusiasmado
si con versos les revelo
que la lucha no ha diezmado
si no cunde el desconsuelo.
Deja ya tus alas rotas
porque el reto has de asumir;
vuela como las gaviotas,
en busca del porvenir
porque anclado en tus derrotas
pronto, pronto has de morir.