¡Tanto tiempo el estar
muriendo!
Apaga ya
este tormento
que consume el vivir
de mis adentros,
que es la vida una cárcel,
la cárcel
en que prisonera
vive la libertad
de mis deseos.
Libérame de la prisión
en que estos huesos son.
Sácame de este encierro
que llagas me hacen
los duros hierros.
¡Tanto tiempo el estar
muriendo!
Sácame de esta tierra
que aborrezco.
-salvador-