Cuando exploramos el arte
del silencio y la meditación
brotan pinceladas de luz,
podemos ver a través
de la ventana, la inmensidad,
genuinos destellos de amor
que trascienden a otra dimensión.
Plasmar con sentimiento
es un encuentro subliminal,
una experiencia única,
no existe tiempo ni espacio.
Libertad plena y absoluta.
NDS 🌟