En tus costas de honda paz
tengo todo el tiempo para amarte
todo el tiempo para soñar tu risa
con una gota de mar rebosando sobre tu garganta.
Oh, amiga, y mía, tu nombre de mujer, tu estética grata
son y serán para este varón enloquecido
ráfaga de un milagro jardín
¡Qué no ves por mi sonrisa!
No me creas si no noto
la cascada de miel desde tus ojos.
¡Tienes tu luz, y brilla y brilla como luna!
¡Tienes tu luz y brilla y brilla como luna!
En tus costas te veo con la forma de un copihue
colgada de opulencia brilladora.
No imaginé que vive contigo una parte del cielo
que se acrisola en tu rostro el mediodía.
Ah, corazón, mi vida, me bastas toda
de la manera que es infinita
con el estable equilibrio de una fe.
¡Qué no ves por mi sonrisa!
No me creas si no noto
la cascada de miel desde tus ojos.
¡Tienes tu luz, y brilla y brilla como luna!
¡Tienes tu luz, y brilla y brilla como luna!
En tus costas mi amor tranquilo
alzaré sobre las olas de tu mar
y volveré en una caricia tu caricia
y en un beso tu beso.
¡Tienes tu luz y brilla y brilla como luna!
¡Tienes tu luz y brilla y brilla como luna!
CHRISTIAN JOVANI
(DERECHOS RESERVADOS DEL AUTOR).