En el horizonte se tiñe de rojo,
un nuevo año llega, con sus promesas de bien.
Es momento de dejar atrás el pasado,
y con valentía construir un nuevo amanecer.
En cada latido de mi corazón,
siento la fuerza para comenzar de nuevo.
Con cada paso que doy, destierro el dolor,
y en su lugar, cultivaré el amor más puro.
Es hora de levantarse del abismo,
de aplacar las heridas y cicatrizarlas.
El amor, esa magia que todo lo ilumina,
se convertirá en mi guía, en mi brújula segura.
Y en ese camino hacia la plenitud,
hallé a esa mujer que amo con devoción.
Sus ojos, luceros que me cautivan,
sus labios, dos pétalos ansiosos de pasión.
En cada verso de este poema construyo,
un homenaje a nuestra historia compartida.
Cada palabra, un suspiro de amor sentido,
un eco de los latidos de mi alma rendida.
En cada día que amanece a su lado,
descubro el amor en su máxima expresión.
En sus brazos encuentro mi refugio,
y en su sonrisa, la respuesta a mi corazón.
Así, con este nuevo comienzo de año,
mi amor por ti se fortalece en cada latido.
Juntos, construiremos un universo de armonía,
donde el amor será el hilo que nos mantendrá unidos.
Y así, construyendo amor en este nuevo año,
nos abrazaremos al futuro sin temor o desaliento.
Porque juntos, seremos invencibles y eternos,
en esta historia que escribimos con amor y sentimiento.