GDA

VIVIENDO EL HOY CON VEHEMENCIA

Viviendo el hoy con vehemencia,
antes de caer perentoriamente en la locura,
amando para poder sentir la vida,
con el sabor de la existencia, hieráticamente,
haciendo caso omiso a los recuerdos
que torturan a los pensamientos de obtusidad,
sin contabilizar los labios que rozaste,
ni cuántas pieles les dejaste marcas con tus manos,
respirar la aquiescencia del presente,
que cada abrazo sea como el último,
entregar el alma en cada «te amo»
y sin planificar el porvenir carente de certeza,
resistir siempre para no terminar muerto.