Sutura el día recordando
y aun así me seduce el espectro.
Mientras, por ahí, paseo solitario
en arpegio urbano, de concierto
Me adentro por las viejas calles
tan solo me persigue el halo,
el pasar de la gente, invocan casuales
y percibo un horizonte regalo
El perfume invade me envuelve,
y la observo, más no la miro.
Ya, no la siento, me persigue,
me distrae el tráfico, más ¡la adivino!
Pues, olvidar no puedo y anhelo,
siento como un abrazo, le sigo,
al borde de la plaza, como señuelo,
al alfaque ende la corriente, consigo
Del encuentro al tropiezo, ¡amor!,
destierra y encandila, la lejanía.
La soledad de tu cuerpo, un clamor,
aquél cuya la usencia ondea, ironía
Ya la tarde fría y gris, esperar,
aun así, creo aceptar, inquieto,
regreso raudo a mi deseado lar,
veo en aquel ajimez, secreto
Excitado, llego al final y duermo,
y aun dormido, me persigue su faz,
aún la vida sentido tenia, la quiero.
La razón, disuelve aquel amor fugaz
¡Aun así, no logro recordar y me olvido!