Freddy Kalvo

El ayer...

Todo lo que ayer pasó,

todo quedó en el ayer

y el alma lo recordó,

llegando el amanecer.

 

Todo lo que aconteció,

nunca más ha de volver.

El ayer ya se esfumó,

como aquel atardecer

 

cargado de nubes grises

con el sol siempre atenuado;

y justo hoy he recordado,

 

todos los momentos tristes.

Y mis ojos han llorado...

¡Recordando que te fuiste!