Lloro, y lloro tanto
Por qué puedo sentir,
como mis heridas van sanando
Porque tus ojitos llorosos
Me demuestran que sientes todo mi amor.
Lloro, y lloro tanto
Porque antes solían rechazarme
Y tú cada día demuestras amarme
Antes solían lastimarme
Y hoy te dedicas a cuidarme
Antes solían ignorame
Hoy tus lindos ojitos, me miran atentos
Antes, me abandonaron más de una vez
Hoy me has acogido en tus brazos
Bajo tus alas me proteges.
¡He de llorar
hasta que mi alma termine de sanar!
Por qué limpiar heridas duele
Pero así como he llorado interminables fuentes, un día no parare de sonreír
Seré quien haya recuperado su valentía
Su osadía, su noble corazón, y sobre todo su enorme alegría...