Alborotado amor que me acompaña,
cual volcán de erupción arrogante,
esa mujer que acepta como amante
entregando su vida en la campaña.
Pasión recibida que enmaraña
la sensatez cualquiera, y sea constante
mantener con cordura en el instante
de pasión, el deseo que acompaña.
Vivir tú, con pasión y sin cizaña,
de esa gente crítica del presente,
juzgando su erotismo más ausente
argumentan historias con patraña.
Con el deseo de amar que se acompaña,
Sintiendo en mi placer, vida aledaña .
Roberto J. Martín González