Ely.M.

Mi niño

 

¿Cómo evito que tú sufras?

¿Cómo borro los ayeres?

¿Cómo te ayudo a creer?

Que en ti nada malo tienes.

 

Que la vida nos aprieta,

los pensamientos nos agobian.

Y decimos tantas cosas,

sin pensar y con querer.

Porque nos gana el coraje,

la desesperación del momento,

de no tener una respuesta

para todo resolver.

 

No eres un error mi niño.

Y nunca lo vas a ser.

Mis estrías no me importan

nunca bella quise ser.

 

Jamás pensé que tu llegada

me daría el mayor placer.

El tenerte en mi regazo

y saber que te formé.

 

Que parte mía tú eres

porque en mi te vi crecer.

Que somos madre e hijo

¡Todo un milagro es tu ser!

 

¿Cómo borro tus lágrimas,

los raspones en tu piel?

¿Cómo te digo mi niño

yo también me equivoqué?

 

Que no soy nada perfecta

solo soy una mujer.

Que quiso darte de todo

y suficiente no fue.

 

 

Que puedo decirte mi niño

que no te haya dicho ya.

¿Cuántos besos y cuántos abrazos

te podrán a ti sanar?

 

Dime ahora y te los brindo.

 

Y si solo quieres jugar

déjame jugar contigo

que el tiempo a tu lado

nunca lo doy por perdido.

 

¿Cómo te hago ver la realidad?

Sin que no te dé miedo vivir

¿Cómo te digo que un día

sin mi tendrás que seguir?

 

¿Cómo te abro lo ojos y te preparo

para ésta vida, para éste mundo de constante cambio?

Dónde el bien y el mal

están en lucha.

Dónde hay gente mala

y buena quizás no mucha.

 

Quisiera no crecieras,

para estar a tu cuidado.

¡Pero sé que no es bueno!

¡Sé que no es sano!

 

No debo preocuparte por tu futuro

porque no está asegurado.

Igual tampoco que siempre

podré estar a tu lado

 

Te haré valiente, luchador

e independiente.

Para que con valor luches por ti

por lo que amas y sientes.

 

Que seas un hombre de bien,

bondadoso y solidario.

Que busque su felicidad

sin lastimar al contrario.

 

Que se rija en la verdad

y que sea humanitario.

Que goce de hacer el bien a todos

sin verse beneficiario.

 

No sé si el tiempo me alcance

para ver si lo he logrado.

Hoy solo quiero que sepas

que eres mi mejor regalo.

 

Que quizás no esté para verte

en un futuro lejano.

Solo le pediré a Dios

que te lleve de su mano.