Espejos rotos que cortan vidas
y desdibujan personalidades,
filosos vidrios que hieren
sentimientos sanos y
lesionan recuerdos gratos...
Cristales viejos se hacen añicos
para seguir soslayandonos,
relaciones obligadas
que enfrían deseos
y apagan hogueras;
extraños llamados de muerte
que encrispan a cualquiera.
Palabras que apuñalan
directo al corazón,
ingratitudes inesperadas
que ensombrecen el alma
y asesinan el amor.