Distancia es la palabra que de mis males es causante.
Quisiera darle fin al sufrimiento de extrañarte,
Ya que mi corazón has dejado cautivo
Y que de todos mis males, has sido el más querido.
Amor es la palara despreocupada,
Que lo soporta todo,
Que no toma en cuenta circunstancias
Y no deja de llenarte con sus extrañezas
Y sus sentimientos retorcidos.
Vivimos engañados, siendo subjetivos.
La objetividad es algo relativo,
Que con el pasar de los años
Cada individuo lo descifrará distinto.
Ninguna verdad es absoluta
Y ninguna mentira se logra sin una verdad.
La vida nos desgasta.
Los años pasan y cada año cumplido
Es un año menos de vida.
Vivir es ir muriendo.
Durante este largo y frío trecho,
Me he topado con grandes desventuras,
Pero ninguna como a la que mi alma escolta,
Dueña de todos mis males.
Señora de todos mis pesares.
Despertar es como vivir en un mal sueño.
Cada vez más cerca de tu recuerdo
Y aún más lejos de tus besos.
Saber quisiera, qué es lo que fue hecho
Para sufrir de tal manera,
Que dormir prefiero,
Para viajar en sueños a tu lado
Y hacer de este sentimiento algo eterno.
Es menester para mis labios sentir los tuyos,
Lo es para mis manos sentir las tuyas.
Qué pesar el de mis días.
Qué larga es la espera
Para el descanso del corazón cautivo.
Quizás la muerte en estos días de amargura
Sea para mí la única ayuda,
Que de mis pesares encontrase cura.
La vida en otra vida,
Ha de ser mejor que la vida en esta vida.
Allí te esperaré,
Añorando que mi desventura se vuelva locura
Y que de sufrir no conozca palabra alguna.
He aquí mi carta de renunciamiento
Y con ella me despido.
Me voy a una vida en otra vida
Que ha de ser mejor que la vida en esta vida.