Que será de nuestro amor, si uno de los dos se fuera
se acabará la pasión la que un día nos uniera.
Juntos no podremos ver tras la montaña esas puestas,
los atardeceres rojos, la luna, cuando aparezca,
la noche y la oscuridad abrirán después sus puertas.
No podremos evitar lo que el destino depara
mientras que el uno se aleja, otro no puede hacer nada
solo recordar momentos que serán agua pasada.
Maldita sea la vida, si algún día nos separa,
por no permitir lo nuestro por mostrarse tan villana,
por no admitir que al querernos nuestro amor continuara.
Aquella llama que ardía, no se extinguirá jamás,
si alguno de los dos falta su fuego se avivará,
quizás exultante un día, regrese del más allá,
el alma que en otra vida no encontró a quien amar.
Classman