Entonces empezaré a robarle versos de amor a Zeus, para dedicartelos a ti,
Empezaré a enamorarme de tu sonrisa sin saber el color de tus ojos;
Achinare mis ojos con la ilusión de verte por primera vez;
Mordere mis labios, con el anhelo de saborear los tuyos,
Dejaré descubierta mi espalda, esperando tus caricias,
Pero más intrigante es cuando llegaré a saber de ti;
Zeus me matará en aquél intento, pero solo entonces él entendera, que solo sus palabras son tan exactas para describir lo que mi corazón sabe pero mi mente no puede decir.