Ella viene y va
Y pasa indiferente,
Qué castigo prominente
Cuando algo no se da
Yo la miro ensimismado
Como quien mira las estrellas
Queriendo tenerla a mi lado
y decirle cosas bellas
Pero su acto insensible
es un delirio inocuo
No quisiera decirlo, es imposible;
Las cosas pasan, pero de a poco
Ya la tarde muere en el mar
Y está por nacer la noche
Saldrá la luna y en derroche
Iluminara mí melancolía
Y yo sin poderla besar
Estaré esperando aquel día
Que sin reproche la pueda amar
sintiéndola solamente mía.