“Décima a la libertad”
Existen los muros de opresión
queriendo apresar la dignidad,
muros de intolerancia y maldad
con la infame y cruel intención
de apagar el canto de un gorrión
con cadenas de ocre oscuridad,
quieren cortar el derecho a soñar
en nombre de ominosa revolución,
no valen fraude ni balas de lección
cuando hay amor por la libertad.
Hermes Varillas Labrador
#FormandoCiudadanía & #ElArcoIrisDeLosNiños
Inspirado en la historia de la canción “Libre” de Nino Bravo, como un justo homenaje a los millones de venezolanos que hoy escapan del infierno en que ha convertido a Venezuela el oprobioso régimen comunista.
La canción \"Libre\" está inspirada en la historia de Peter Fechter, un jovencito de poco más de 18 años, \"casi veinte\", que fue el primer alemán que intentó saltar en 1962 el recién estrenado muro de Berlín. Llegó al muro acompañado de un amigo, Helmut Kubelik, que por suerte si llegó rebasarlo, pero Peter, una vez que \"extendió sus alas\" y se encaramó al mismo, recibió el alto de los soldados soviéticos, pero como dice la canción \"marchaba tan feliz que no escuchó la voz que le llamó\" y de esta manera, al no ser atendido el alto, dispararon sobre el joven que fue alcanzado por varios disparos y cayó del muro en lo que se denominaba \"zona de nadie\". Allí quedó tendido a la vista de todos, ciudadanos, periodistas y militares, pidiendo auxilio mientras se desangraba a borbotones, sin poder moverse por la seriedad de las heridas, y sin nadie que se atreviera a recogerlo. Los occidentales tenían miedo de recibir disparos en aquella nueva situación y tan solo se atrevieron a lanzarle un botiquín, que de nada sirvió a un Peter Fechter casi moribundo y a cada minuto con menos vida. Los rusos a los que pertenecía la zona muerta aguardaron unos interminables 50 minutos de agonía del joven hasta que procedieron a recogerlo, momento que queda recogido en una foto. El pueblo berlinés que presenciaba la escena gritaba a ambos bandos que remediaran la muerte de aquel jovencito, pero nadie hizo nada, incluso las fuerzas occidentales impidieron que ningún civil acudiera a ayudarlo. Al final, en el lugar del suceso solo quedaron flores que fueron lanzadas por los indignados berlineses. Los guardias que le dispararon mucho mas tarde fueron a juicio y fueron condenados. Arrepentidos dijeron \"que vivirán por siempre con la culpa de su crimen\". Sus sentencias fueron revocadas después de 4 meses. No sería el último en morir en el muro, aun vendrían 260 más. El último fallecido de esta larga lista fue Chris Gueffroy, en 1989, que curiosamente tenía también veinte años… Hoy en día hay un monumento en el lugar en el que cayó Peter y también hay una canción cuya letra viene bien releer desde esta nueva óptica. Nino Bravo la escribió tras la impresión que le provocaron las imágenes que del suceso salieron en la prensa mundial.
Las imágenes corresponden a Peter Fechter, y al monumento erigido en su memoria.