Una noche de Sevilla, bajo la luz de la luna,
una romántica estampa dibujaba tu figura.
Era nuestra despedida de aquella hermosa ciudad
tras nuestra estancia en Triana, volverá la soledad.
De nuevo otra vez mensajes, llamadas al celular,
esa maldita distancia me acabará por matar.
Volverán los días tristes en este norte polar,
esas tenebrosas nieblas que te llegan a angustiar.
Henchido de esa nostalgia solo me queda extrañarte,
acercarte hasta mis sueños donde allí poder pensarte.
Desde ese primer momento no he hecho más que reafirmarme
tras este encuentro final, no volver a separarme.
Con resiliencia sufrimos esta brutal lejanía
pensando que ese momento, ha de llegar algún día.
No parece una entelequia el deseo que albergamos
desde que nos hemos visto, estamos enamorados.
Classman