Moyilin

A Medio Vivir

Parece mentira qué después de tanto tiempo, tanta distancia y tanto silencio aun no me acostumbro a despertar y entender que no estas, a tomar el café de la mañana solo sin saludarte, a no pensarte y a no compartir contigo mis días, pero es que parece como si hubiera sido ayer la última vez que nos vimos desnudos, que estabas abrazandome y sentia tus manos aferrarse fuertemente a mi cintura para no dejarme ir, ese último beso con sabor a nostalgia, tus ojos inundados de preocupación y tu voz aquebrantada de tristeza diciéndome adiós.

 

Después de tanto tiempo aun te espero como siempre en el mismo sitio, ahí lejos donde en cada sueño viajo y me encuentro contigo, te veo hermosa, guapa, sonriendo, esperándome abierta de manos para sentír tu pecho presionarse con el mio y escuchar tus latidos, ver tus ojos brillando y ver el fuego en tu piel llena de ternura y cada vez se me hace más difícil despertar y darme cuenta que es la almohada la qué estoy abrazando y que solo fuiste una creación de mi imaginación porque sin ti todo se quedo a la mitad.

 

Llevamos mucho tiempo que te escribo y tal vez te aburro con tanto poema pero solo te escribo por si acaso tu también necesitas saber de mi, no esta de más que me hables de vez en cuando para calmar mis ansias, hacerme saber que me extrañas y que nada de lo que escribo se pierde en tu corazón, necesito saber si me amas y si me esperas con las mismas fuerzas qué yo para besarnos y dejar todo en tus manos porque sin ti todo se quedo a la mitad.

 

Así paso mis días, a medio vivir, a medio sentir, a medio cantar, medio corazón, media alma y medio pulmón, te quedaste con la mitad de mis latidos, mis suspiros, mis sentimientos, mis besos, mi cariño, mis sueños y con todo mi amor, trato de encontrar la salida pero en cada intento me pierdo más, ahora entiendo que no puedo salir de ti, que te amo y así se me pasa la vida extrañándote porque sin ti todo se quedo a la mitad.