Te dije mi verdad
y no me llamaste valiente.
Te dije que te amaba,
que estaba enamorado,
que no te podía sacar de mi cabeza
y el rechazo fue tu moneda de cambio.
Te dije que te deseo
y mi furor fue llamado pecado,
sólo por soñar hacerte mía,
más allá de los tabúes
y las convenciones.
Alexander Elías2024
#poética