Ely.M.

Tristeza

 

Últimamente he estado engañando a la tristeza,
confundiendola por lapsos.
La maquillo un poco con el pretexto de que debe verse bien.
En cierto modo funciona por un par de días, a veces horas.
Pero es tan inteligente,tan sabía, tan perspicaz.
Que en en un suspiro se lava la cara.
En un aroma se pone su mejor vestido.
Con música suele mostrarme otro cielo.
Y yo caigo rendida ante ella.
Me conmueve su belleza. su ternura, su dolor.
Y la acompaño tras la ventana viendo el cielo, bajo la cobija, sobre la almohada o en la ducha.
Secretamente somos inseparables como dos buenas amigas.
Pero trato a toda costa que nadie la vea,que nadie la conozca,que nadie sepa de ella.
Porque ella es mía.
Ha estado desde siempre.
Y de cierto modo la quiero conmigo.
Es tan callada, por eso es mi mejor cómplice.
A veces la complazco dejándola ver los días grises, son sus preferidos.
Y aunque le asustan los rayos y truenos, solo la lluvia la hace sentir libre.
Definitivamente la lluvia le da la felicidad.