El beso más difícil no es el primero sino el último,
Aquel que sella el adiós, que rompe el encanto.
Es el beso que lleva consigo la despedida,
El que llena de melancolía nuestra vida.
Es un suspiro lleno de dulce amargura,
Que nos arranca el alma y la ternura.
Es el beso que cierra un capítulo de amor,
Deja cicatrices y nos deja sin color.
Es el beso que nos deja sin aliento,
Que nos hace recordar cada momento.
Es el beso que se lleva el tiempo,
Y nos deja con el corazón sediento.
Es un adiós que se convierte en destierro,
Que nos hace sentir como en el infierno.
Es el beso que marca el final de una historia,
Que nos llena de tristeza y una eterna memoria.
Pero en medio de la tristeza y la añoranza,
Ese beso nos recuerda la fortaleza y esperanza.
Porque cada despedida es un nuevo comienzo,
Y el último beso marca el inicio del tiempo.
Así que no temas al último beso difícil,
Pues tras él se oculta un nuevo abanico de posibilidades.
Porque el amor siempre llenará nuestros corazones,
Y a pesar de las despedidas, siempre habrá razones.
“Serl “