GDA

TU AROMA EN MI ALMA NO SE HA DE DESVANECER

Tras el idilio, te perpetuaste en mi ser,
no hay quien pueda extraerte de mí,
eres la presencia que me hace vibrar;
habitaste en las vidas que antes viví,
y resurgirás en las siguientes,
así que tu triunfo puedes pregonar,
pues aunque perciba mil olores,
tu aroma en mi alma no se ha de desvanecer.