Tu recuerdo me devora
en los minutos finales del adiós.
Sé que tengo que partir
lejos de tus abrazos,
Tus risas, tus besos, tus ojos
aquellos que siempre desee.
El final se acerca,
y ahora que tengo que marchar,
en esta noche llena de amargura,
con tu cara cubierta por el llanto
y mi alma hecha jirones
me dices que me amas.