Las búsquedas pueden dejarnos sin nada qué morder
Las búsquedas despreciadas
Pueden ser las que otro anhele día y noche
Y aprendemos que nada está bien y nada está mal
Quizá la forma de respetar esa memoria
Sea dejando que las causas se sucedan
Tal vez (siempre tal vez) aprendamos poco a poco
A apreciar sin categorías el día y la noche
Pero, cuándo será momento de las conclusiones
Cuándo será momento de levantarse y recordar el pasado
Sensaciones que otorgan voluntad
Imágenes que nos hacen sonreir
Atravesamos los días y creemos que así se originaron las noches
Sabes que el alimento se halla también en los pantanos
Todo tiene que ver con algún límite inventado
Vienen sensaciones de cansancio
Vienen a mí, siluetas justificadas
Pero es otra la presencia que anhelo
La mía en el otro ojo
O soy solo yo mismo
Y solo reclamo la parte de la que soy dueño
Atenta está la tierrra, tiene dentro suyo
El temor a ser visto
El de quien adopta deberes y los excusa porque falla
El peso de no saber