¡¡CANTO A UN AMOR PERDIDO!!
( soneto)
Cuando la tarde muere desolada,
cuando la lluvia moja los rosales,
mis lágrimas son frágiles cristales,
que mojan tristemente mi almohada.
Desangra displicente y condenada,
la mirada perdida en madrigales,
la sombra de mi sombra entre corales,
tristeza que circunda acobardada.
Sin morada en la tarde yo me muero,
perdida entre la niebla más profunda.
Estoy triste esperando aquél te quiero.
Hoy pienso que la lluvia fue fecunda
perdiendo aquel amor, el más sincero,
que ha quedado en la tarde moribunda.