Nadie ve en tus ojos lo que yo veo,
Olvidados universos tan bastos de belleza.
En ellos se sumergen tu mundos de magia.
Las palabras que escribo para tu mirada,
Intentan ser hermosas para con tus universos,
Aunque palabras, son solo palabras, y para denotar tu belleza, no bastan.
Nadie ve en tus cabellos lo que yo veo.
Oscuros y tejidos de manera perfecta.
En ellos, oscuros como la noche, atrapas mis sueños,
Lllenando de olvido tristes recuerdos.
Inundando el alma tu pelo al viento,
Acariciando silencios de verano a invierno.
Nadie ve en tu cuerpo lo que yo veo,
Ondas tan bien esculpidas por el tiempo,
Endulzan la mirada del buen mirador.
Letal tu figura de ángel que me lleva al paraíso.
Indefinidamente en tus ojos dulce abísmo,
Abrazan el tiempo eterno del olvido.
Nadie ve en tí lo que yo veo,
Oro de mis más bellos pensamientos.
Eterna hermosura de eterno tiempo.
La magia del viento acaricia mis sentimientos.
Infinita tu belleza, interna y externa,
Aunque a los ojos de miles eres imperfecta; para mí eres perfecta.