Mi mundo ha escrito la historia desenterrada de mi alma, construir pasados es el pan del día de cada momento, prometer grandeza, cuando solo se pueden alcanzar las cercanías más lejanas del suelo mientras se camina. Busco un destino, prelabrado y diseñado para encorvar el tiempo, hoy día el amor es una escusa fuera del pecho, que grita en mis sueños, que necesito las almas suficientes para amar al mundo, con caricias foráneas y orgasmos muy largos que compartir, las puertas del silencio están perdiendo su verdor y el susurro de mis besos ya es menos sonoro que el tiempo.
El hediondo recuerdo de tu amor, rondo mis desvelos y turbo mi intimidad en la espera de olvidarte, maldita dignidad que te abandona, puto honor que nunca tuviste en esa boca llena de suspiros ajenos, odiar es mucho empeño por eso te olvide...