Lea Nieves Torres

Es Febrero

Amado mío tú y yo habitantes de la selva de la noche recorremos juntos de la mano todos sus jardines prohibidos sus infinitos jardines prohibidos sus bastos jardines prohibidos los habitantes de la noche alistan sus instrumentos de cuerda miles de liras arpas llenan el aire con su mágico sonido el viento se une al canto y mueve la fronda verde de la selva y en la noche brilla tu hermosura amado mío y tu voz susurra mi oído loas a mi hermosura me miras y tus ojos hablan el dialecto de los dioses del Olimpo y como Ares y Afrodita nos entregamos al fuego del amor mientras las hojas de los árboles verdes brillan en el lecho verde de la noche mientras las gotas de lluvia verdes se iluminan con el juego de amor verde mientras las estrellas y la Luna verdes iluminan la selva de la noche hombre de hierba verde eres tú hijo de la selva de la noche mujer de hierba verde soy yo hija de la selva de la noche tu cabello amado mío es semejante a la hierba del mar entre mis manos mi cabello es para ti semejante a la hierba del mar entre tus manos de hierba son tus cabellos de hierba es tu cabeza de hierba son tus cabellos en tu cabeza de hierba con su cerebro de hierba de hierba también tu cuello de hierba verde es tu pecho de hierbas son tus entrañas de hierba verde tus brazos de hierba verde tus piernas tus músculos son de hierba tu corazón es de hierba todo nuestro cuerpo es verde dos amantes verde verde en el verde de la noche nuestros cuerpos verde hierba se van batiendo batiendo al ritmo fiel de las olas que van chocando chocando sobre las desnudas costas bañandolas en espuma mientras bandadas de pájaro se posan en nuestro lecho verde de la selva verde se posan en nuestro lecho en una danza nupcial las criaturas de la Tierra las criaturas de la mar aplauden nuestro amor verde con un sereno rumor. Comprendí nuestros cuerpos danzan la danza de amor danza verde de la luna y danza verde del sol danza de nuestros ancestros danza de nuestro color cuerpos que ardientes con cita a la danza del amor en el juego de la danza nuestros pies se echan raíces en tanto que la mar lanza fiera sondas susurrantes sobre las playas rocosas verde que te quiero verde hombre verde que te adoro verde que te quiero verde sin tu amor verde yo lloro...

 

Cuando estás a mi lado mi mente escribe versos mientras me hablas bajo la luz del día mi mente escribe versos bien para ti mientras el sol brilla como un diamante sobre la ciudad. Siento tú ahora suave que me arrulla y recuerdo tus frases de cariño tus canciones de amor, las flores que amoroso me regalas. Tú eres la miel eterna que alimenta mi amor y mi pasión. Dulce jardinero que mi jardín alegra podando mis Rosales para sus flores florecer patrulla mi amado con tus besos que yo te arrullaré con mis versos de miel de chizaré con mi suave perfume y tatuaré mi mensaje en tu piel. Haré de mis poemas mil susurros. Mis ojos no se cansan de mirarte. Eres mi único amor entre millones y escribiré mil versos para ti Irán girando en la clepsidra griega del tiempo y la distancia que me di su pálpito en la copa fermentada destila un fino canto para ti mi corazón a ti te pertenece y sus latidos palpitan por ti. El vino que a librarme ofreces las caricias que guardas para mí y sin pudor al amor nos entregamos con tal Pasión con alto frenesí y del mundo de afuera nos olvidamos Por un instante feliz. Ninguna otra mujer te amará tanto Como yo te amo nunca te amará mi amor es más alto que las más altas y más que existen en el mundo y más allá. Amor de mis entrañas tu amor vale más que el oro y las preciadas perlas. Tú eres el guardián de mi bosque. Qué hermoso eres guardián de mi bosque.

 

 

 

Del jardín de la noche surge amado mío. Hermoso es tu semblante tu cuerpo de atleta semejante a los dioses antiguos del Olimpo, surges en el carruaje de los suenos. La noche y sus jardines prohibidos que traen a mí de nuevo. Las hojas de los árboles brillan en el lecho de la noche absorben las estrellas fugaces y Los luceros en su dorso Y en vez la vida duerme en los bosques coloridos de la noche y las botas de lluvia parecen finas perlas sobre su dorso y su envés. Tu cabello es la hierba de trigo entre mis manos que brilla como el oro sobre tu árbol y la blancura de tu tallo eres hombre de hierba de hierba son tus ojos de hierba tus pestañas de hierbas son tus brazos que me acogen de hierba son tus besos de hierba son tus músculos de hierba es tu pecho de hierba eres hombre de hierba y tus pies son de hierba y de tu cuerpo salen largo ondas raíces que me acercan amor a tus jardines. La noche tiene más luz que el día en esta noche de febrero en que me amas y juntos escuchamos nuestra música la música preferida de chopin cuyas notas se deslizan en el manto de la noche se deslizan en el manto del día se deslizan en el manto del cielo azul poblado de luceros estrellas y planetas. Amo la rosa roja que siempre me regalas como símbolo de nuestro amor eterno. Nuestro amor es una fuente cristalina que cae de las más altas cumbres del amor y de la vida. Al paso de nuestro amor todos sonríe las aves cantan y vuelan alegres las mariposas danzan y emiten sus chillidos la hierba aplaude el amor que sentimos en nuestros corazones se el tiempo de cortar margaritas y preguntar me quiere no me quiere ha llegado ese día en que me quieres el tiempo ha pasado nuestro amor sobrevive a todas las tormentas. Tu amor es semejante a la bella primavera que permanece eterna en el recuerdo con su perfume espanta los malos sentimientos y una rosa efímera se eterniza en instantes. Tu amor es como magia que brinda un sueño nubil un sueño que no muere que guarda mil encantos un sueño que asciende escalas musicales y que renueva cantos únicos y repetibles y reemplazables.