Me cautiva tu facha misteriosa
con tu amor de terneza delirante,
mis sentidos seduces fascinantes
con tu dulce caricia primorosa.
Embelesa mi ser tu voz preciosa,
con dulzura divina tan galante
me cautiva tu facha misteriosa
con tu amor de terneza delirante.
En tus brazos anido candorosa,
porque a mi alma la dejas rebosante
de grandioso esplendor alucinante:
¡Con sonrisa tan tierna y tan graciosa,
me cautiva tu facha misteriosa!.