En la absurdidad me detengo a reflexionar,
busco en la vida un propósito que me haga brillar.
El presente me llama a encontrar la alegría,
en cada instante hallar la luz que no se desvía.
Decisiones auténticas, mi camino trazaré,
honestidad y valores, en cada paso mostraré.
Con empatía y solidaridad al mundo miraré,
en cada corazón la compasión sembraré.
Autenticidad, mi guía en esta realidad compleja,
viviendo en verdad, en cada desafío una pieza.
Así abrazo la existencia en su absurda complejidad,
encontrando significado en cada auténtica verdad.