Las estrellas nunca dejaron de brillar,
las nubes avecinaban tormenta,
la constelación sigue ahí detrás.
Atravesamos una noche sin luna
pero agarrados de la mano
contemplaremos el vientre de Nut.
No necesito un astrolabio
para saber donde estás.
Cerrando los ojos,
navegando este desierto
te voy a encontrar.
Escribí \"te amo\" en el firmamento,
así aunque estés lejos podrás leerlo.
Enséñame a bailar
la danza de los cuerpos celestes.
Siempre estaré esperándote
en el templo de Bastet.
Si nuestro amor muere,
el mundo estará condenado
con la ira de Sejmet.