aimara

Hexagrama

Cae la tarde.
Mi mano dibuja tu hexsagrama.
Quijote sin arado,
sin toga emblanquecida
en piedra muerta rasgueas tus días.
Una lágrima roe por tu mejilla.
El tiempo la absorbe.
Consternados los unicornios lloran,
las hadas huyen despavoridas.
Los centauros desaparecen ante tus manos.
Has perdido la fantasía.