I
Quiero lo que a nadie le entregas,
lo que nadie quiere: tu cólera,
la pólvora que estalla en tu grito;
tus lágrimas de cristal derretido
y el río de vidrio que trae tus penas.
—Yo lo quiero porque te quiero—.
II
Quiero de la atmósfera
que envuelve tu cuerpo,
el aire apretado y venenoso
y el frío del sol negro
resplandeciente en tus ojos.
Quiero el azufre de tu aliento
y el agrio de tu lengua torturada.
Tu boca que triza palabras y besos
la quiero en mi boca enamorada.
III
Seré el martillo,
el cincel y el puntero
en tu piel de marfil al fuego.
Sellaré grietas de tu mente,
sangraré tus heridas;
moriré tu muerte
y tú respirarás mi vida.
Quiero hacer contigo
lo que la tierra hace con la semilla.
Felicio Flores