Qué es esto que tanto me ata a tí
Cada lágrima caída de mis ojos
borra con su leve caminar un trozo de nuestra historia
Y yo aquí, ogro malévolo corazón helado
nunca supe adivinar que no era esa la forma de llegar a tí.
Tu necesitas más cuidados, más fragilidad en mis movimientos
deseos controlados y suministrados en pequeñas dosis.
Acostumbrar tu cuerpo al mío, almas gemelas unidas en la desesperanza.
Qué hago yo aquí, si no amarte, pues no hay más que amor por tí.