Quindelaire
sonrisa de pájaro
labor entre nubes
que llueves con sol.
Entretejes los cirros
celestes
y al trueno engarzado
le bordas amor.
Quindelaire
como hadas madrinas
alando divinas
la eternidad.
Sois las las manos
pintoras nativas
del mágico cofre
que el arco trazad.
Vuestro pulso
a siete colores
de la luz conoce
su interno pensar.
Y lo pintas
desnudo de blanco
brillando ese iris
que acaba en la mar.
Quindelaire
sois una, sois mil
pintora del cielo
nacida en abril.
La leyenda
que narra tu vida
es más colorida
y su prosa febril.
Tantos años
allí retenida
la historia perdida
hoy se logra oír.
Has salido
de los caracoles
y alada en el viento
se te oye vivir.