Es temprano aún y el sol despunta
e ilumina nuevos días…
Y esa luz interior de nuestras almas
encuentra cauce hacia la puesta.
¿Que no ves que hay tiempo aún
para arar la tierra yerma
y besar la rosa… y alcanzar
las alturas azulinas como el vuelo
tenaz de la paloma?
Ya la lluvia no moja nuestros ojos
nuestros oídos sólo están para lisonjas
y mis labios sólo esperan por los tuyos
para sellar el tiempo… que no es tarde,
que amanece y el sol, aún despunta!